Representa un récord nacional, aunque afortunadamente el conductor que lo alcanzó no será premiado por ello, sino todo lo contrario. Es el récord de la temeridad. Un joven de 23 años circulaba a bordo de su coche BMW por la autovía A-5, a su paso por Mérida, (Badajoz) a 248 kilómetros por hora. Su exceso quedó registrado por un rádar móvil de la Guardia Civil en el kilómetro 309 de dicha carretera.
Se trata de una velocidad inédita, según han confirmado fuentes de la Unidad de Tráfico a EL MUNDO.ES, pues no se han encontrado ningún caso similar en los archivos nacionales del cuerpo, que nunca pudieron hacer fotografía alguna a un vehículo en todo el territorio nacional a esta velocidad tan extrema. A pesar de ello, y por fortuna no se produjo accidente alguno como consecuencia de que doblara la velocidad permitida al pisar el acelerador (120 km/h).
Al conductor, que iba acompañado en su vehículo por su novia y su dos hijas -menores de edad-, no le pudieron dar el alto los agentes debido a la excesiva marcha a la que circulaba y sólo unos kilómetros más adelante, ya en la A-66, cerca de la localidad de Torremejía en sentido Sevilla, fue interceptado por un coche patrulla que había recibido el aviso. Seguidamente, y tras darle el alto, el implicado fue trasladado al cuartel de la Guardia Civil de la capital extremeña, acusado de dos delitos contra la seguridad del tráfico (conducción temeraria y exceso de velocidad).
Aunque el joven dio negativo en los controles de alcohol y drogas y fue puesto en libertad con cargos dos horas después de la detención,el 'record' puede suponerle bastante más de una multa. Según la delegada del Gobierno en Extremadura, "por esas circunstancias podría perder la patria potestad".
Fuente: elmundo.es
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