La ALDF le había solicitado a la Corte que revocara la decisión que adoptó el ministro Sergio Valls Hernández, desde el 28 de enero pasado, al admitir a trámite el juicio que promovió el procurador en el que también impugnó la posibilidad de que las parejas del mismo sexo también puedan adoptar niños.
Al revisar su petición los ministros de la Segunda Sala llegaron a la conclusión de que la decisión que adoptó su compañero Sergio Valls fue correcta, y por tanto, declararon improcedente el recurso interpuesto por la Asamblea.
Para adoptar esta decisión la Segunda Sala se concentró únicamente en revisar cuestiones de forma y no se pronunció sobre el contenido de la demanda interpuesta por el procurador.
A diferencia de la ALDF, el gobierno del DF se abstuvo de impugnar la admisión del juicio. Con esta decisión dio por sentado, de manera implícita, que la demanda del procurador cumplía con todos los requisitos de forma para que fuera admitida.
En lugar de impugnar la admisión del juicio, el gobierno capitalino se concentró en dar respuesta a cada uno de los argumentos esgrimidos por el procurador, a fin de demostrar que la reforma no viola ningún punto de la Constitución federal.
Después de esta decisión que adoptó la Segunda Sala sólo queda esperar a que termine el periodo de deshago de pruebas y presentación de alegatos de todas las autoridades involucradas en el juicio impulsado por la PGR, para que el ministro Valls elabore su proyecto de sentencia y lo presente ante el Pleno de la Corte para que sea analizado y votado.
Para que la reforma capitalina pueda ser anulada es necesario que al menos 8 de lo11 ministros de la Corte se pronuncien en este sentido, lo cual difícil por expertos en la materia.
Fuente: eluniversal.com.mx
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